El mercado inmobiliario peruano está experimentando una notable expansión más allá de Lima, con Arequipa emergiendo como un nuevo polo de desarrollo residencial. Según un informe de Century 21 basado en datos de Tinsa Perú by Accumin, cinco distritos arequipeños concentran 21 proyectos residenciales activos, sumando un stock de 489 unidades disponibles. Estos distritos son Cayma, Cercado de Arequipa, Cerro Colorado, Miraflores y Sachaca.
El precio promedio por metro cuadrado varía significativamente entre estos distritos. Miraflores presenta el valor más bajo con S/1,072, mientras que Cayma alcanza los S/1,564 por m². Este último destaca por albergar proyectos de alta gama, como los ubicados en la Urbanización Teresa de Jesús y la Cooperativa de Ingenieros, donde los precios oscilan entre S/6,000 y S/6,100 por m².
En cuanto a las características de las viviendas, los departamentos de tres dormitorios son los más demandados, representando el 63% de las ventas. La mayoría de estos proyectos están dirigidos al segmento B1, con precios entre S/445,000 y S/670,000, seguido por el segmento B2, con precios entre S/330,000 y S/445,000.
En Lima, la actividad inmobiliaria sigue siendo intensa. Hasta el cierre del primer trimestre de 2025, se registraron 823 proyectos con 25,877 unidades disponibles. Los distritos con mayor concentración de proyectos son Miraflores, Surco, San Isidro, Chorrillos, Jesús María, San Miguel, Pueblo Libre, Surquillo, Lince y Cercado de Lima, que en conjunto acumulan más del 70% de las unidades disponibles.
Una tendencia destacada en Lima es la preferencia por edificios de menor altura. Según Tinsa Perú, el 49.4% de los proyectos inmobiliarios no superan los 10 pisos, especialmente en distritos como Surco, Miraflores, San Isidro, San Borja y Chorrillos. Esta tendencia responde a la demanda de viviendas con menor densidad poblacional y mayor privacidad.
Además, se observa un crecimiento en ciudades intermedias como Tarapoto, donde la construcción de viviendas multifamiliares y espacios compartidos está en aumento, reflejando cambios en las preferencias de los consumidores y en la manera en que los desarrolladores abordan el crecimiento urbano.
En resumen, el mercado inmobiliario peruano está diversificándose, con Arequipa y otras ciudades intermedias emergiendo como focos de desarrollo, mientras que Lima continúa adaptándose a nuevas tendencias y demandas del mercado.
FUENTE: GESTIÓN